
Un hombre asaltó un frigorífico con una escopeta recortada, luego fue perseguido hasta su casa, pero fue encontrado escondido en la cucha del perro de una vecina. Allí se lo aprehendió y se le secuestró el arma empleada. Sucedió en la mañana del lunes, en la localidad de Luis Lagomarsino.
Ocurrió cerca de las 10 de la mañana, cuando en el frigorífico denominado «La Juana” ubicado sobre la ruta 26 –entre Haití y Pedro Nieto– irrumpió un desconocido con una escopeta recortada. Rápidamente, llegó hasta la caja y amenazando a la empleada, la obligó a que le entregara el dinero. Con un poco más de 2 mil pesos y tres celulares de clientes, salió corriendo hacia la estación de Maquinista Savio.
Un cliente que llegaba al comercio en su moto comenzó a seguir al delincuente mientras alertaban al 911. A dos cuadras del frigorífico, el sujeto alcanzó a ingresar a una vivienda y fue cuando efectivos del SAP y del CPP llegaron y fueron guiados por vecinos hasta el lugar.
Tras solicitar la autorización de la mujer moradora –que resultó ser la madre del buscado– la policía ingresó a la casa y al no hallarlo, comenzó a buscar en las viviendas contiguas. Fue en una propiedad aledaña, en la cucha de un perro, donde los policías pudieron detectar al delincuente al que se le veían las zapatillas deportivas negras. Los ladridos de Fermín -el perro-, molesto por la invasión de su propiedad, los habían alertado.
El sujeto fue aprehendido y esposado. Allí se le secuestró la escopeta recortada, pero que no tenía proyectiles y gran parte del dinero y los celulares robados. Una vez identificado se supo que el delincuente tiene 23 años y con importantes antecedentes policiales. Intervino la UFI Nº 2 de Pilar a cargo de Martín Otero.