
piernas policía
Un hombre a quien le habían robado una moto que tenía para la venta, baleó por error a otro al que señalaba como el ladrón que le sustrajo el vehículo. Horas después, quedó detenido cuando se presentó en la comisaría para denunciar el robo de su rodado y también de un arma. La víctima está internada en el hospital, de Pilar fuera de peligro.
Todo comenzó en Garín aproximadamente a las 15 del martes, cuando un hombre de 27 años, identificado como Emanuel Corbalán, había puesto en venta su moto a través de Internet. Una Honda CBX de 250cc de color rojo.
Un supuesto comprador llegó en un remís y, tras una charla, le pidió probarla a lo que Corbalán accedió. Pero el comprador no regresó.
Enfurecido, el vendedor se subió a la camioneta Renault Duster gris, que era el remís en el que había llegado el ladrón, y obligó al remisero –un hombre de 58 años domiciliado en Escobar- a salir a buscar al sujeto que se llevó su moto.
Recorrieron Garín y Maquinista Savio, hasta que llegaron a la localidad pilarense de Luis Lagomarsino. Ya en la ruta 26 y Haití, divisó a un joven que circulaba en una moto como la suya, misma marca, modelo y color.
Convencido de que era el ladrón, ordenó al remisero a que le cruzara el auto. Al bajarse, hizo detener al motociclista, identificado como Luis Zabala, de 29 años, a quien apuntándole con una pistola lo obligó a descender y ahí comenzó un ataque salvaje que incluyó trompadas y patadas. Hasta que forzó al motociclista a arrodillarse disparándole en la cabeza, para luego escapar con la moto con dirección a Maquinista Savio.
Sin embargo, a las pocas cuadras, notó que había cometido un error fatal: la moto que se llevaba no era la suya.
De inmediato tiró el vehículo y el arma a una zanja y escapó a pie.
Horas después, Corbalán, se presentó en la comisaría Escobar 3ª, de Garín, diciendo que le habían robado su moto y un arma de fuego.
Pero, al mismo tiempo, la policía era alertada acerca del joven gravemente herido de un disparo en la cabeza. Los policías relacionaron los hechos y Corbalán quedó demorado.
Minutos después, en la misma comisaría, se presentó el remisero como testigo de todo lo acontecido y complicó aún más al agresor, manifestando cada uno de los detalles que le tocó vivir.
Fuera de peligro
La víctima que se domicilia a pocos a metros del lugar del ataque se encuentra internado –fuera de peligro -en el hospital Juan Cirilo Sanguinetti de Pilar.
Mientras tanto, el verdadero ladrón y la moto que tenía para la venta el agresor, aún no aparecieron.
Horas más tarde, se realizó un allanamiento en el domicilio del vendedor, en donde se hallaron elementos de prueba para la causa, como ser 1 caja de pistola marca Norinco calibre 45 con el respectivo manual; un cargador completo con proyectiles de pistola calibre 45; 1 camisa cuadrillé de color celeste y documentación de una moto Honda CBX 250 de color roja y con patente 574 –KLR.
Precisamente en el lugar del hecho, los investigadores hallaron junto al charco de sangre que perdió la víctima, un cápsula servida de pistola calibre 45.
La causa está caratulada como «Homicidio en Grado de Tentativa y Privación Ilegítima de la Libertad- Aprehensión”.